lunes, 11 de diciembre de 2017

DIA DE LA DISCAPACIDAD

El próximo 3 de diciembre se celebra el día de la discapacidad. Es una fecha que todos los años nos invita a reflexionar y a ser resilientes. La discapacidad es algo muy complejo, como lo son todos los temas cuyo centro de interés somos las personas. Todos los años se enfoca desde perspectivas diferentes con el propósito de ir avanzando en todos los frentes.
El documento que viene a continuación pone sobre la mesa las inquietudes de los colectivos de discapacitados sobre el tratamiento de la discapacidad en los medios de comunicación. Aunque tratado hace años, como se aprecia por las fechas, sigue siendo de plena actualidad porque aún queda mucho camino por recorrer.
En primer lugar hago referencia a lo que se recoge en la Presentación de la obra “Percepción de la imagen de las personas con discapacidad por los profesionales de los medios de comunicación” editada por Fundación ONCE en abril de 2010.
La Fundación ONCE para la Cooperación e Inclusión Social de Personas con Discapacidad impulsó en el año 2007 la creación del Comité de apoyo a las personas con discapacidad en los medios audiovisuales con el objetivo de que las entidades que se incorporaran al mismo contribuyeran a mejorar la imagen que se proyecta sobre las personas con discapacidad a través de los medios audiovisuales.
Las entidades que participan en este Comité firmaron un Manifiesto en el que se recogían, entre otros, los compromisos de promover prácticas que favorezca la plena inclusión de las personas con discapacidad a través de situaciones de normalidad, también el fomentar la presencia de las personas con discapacidad en los medios audiovisuales en proporción similar a su importancia poblacional y evitar tratamientos que pudieran lesionar o menoscabar los derechos y la dignidad de las personas con discapacidad.
Estas actuaciones emprendidas por la Fundación ONCE están fundamentadas en nuestro convencimiento de que los procesos de inclusión de las personas con discapacidad se facilitan y consolidan con una mayor presencia en los medios de comunicación y con un tratamiento más favorable y proporcionado en los medios audiovisuales.
No obstante, a pesar de estas actuaciones, a la hora de poner en marcha acciones concretas, era necesario tener un conocimiento detallado de cómo perciben los profesionales de los medios de comunicación la realidad de las personas con discapacidad. Por ello, abordamos la elaboración del estudio que da contenido a esta publicación…
Sin duda, las conclusiones reiteran un hecho ya apuntado en otras ocasiones: tenemos mucho trabajo que realizar. La voluntad de los profesionales de los medios audiovisuales en relación al tratamiento de la imagen de las personas con discapacidad es positiva, pero tenemos que seguir trabajando en el ámbito de la sensibilización y el conocimiento.
Continúo con algunas reflexiones recogidas de la citada obra que a su vez pueden abrir un debate.
  1. El cine, no lo olvidemos, es fundamentalmente espectáculo. Pero también orienta hacia la reflexión ¿Se puede decir que Mar Adentro no ha alimentado horas de debate ciudadano sobre cuestiones como la dependencia, la libertad individual, la ética o la eutanasia? La cinta de Alejandro Amenábar, pese a ser un filme muy cargado emocionalmente, trajo a primera línea de discusión un tema y unos protagonistas que instaban al espectador a tomar posiciones y a participar en alguna o en todas las facetas implicadas en este complejo debate. No en vano el cine constituye la base de una de las herramientas de reflexión más eficaces y mejor valoradas en los centros educativos pora facilitar los procesos pedagógicos de cualquier ámbito o nivel.  No es infrecuente que se den títulos, sobre todo en el terreno del cortometraje, que reciban numerosos premios en certámenes o festivales centrados en la promoción de la conciencia social en relación con determinados temas, respaldados o financiados por instituciones de toda índole que, sin embargo, pasan absolutamente desapercibidos fuera de esos foros específicos, algo que debería mover a la reflexión sobre la eficacia real de las políticas de promoción.
  2. La discapacidad no debe ser noticia, debe tener su lugar en el ámbito social y mediático; exactamente igual que cualquier otro grupo social.
  3. Hay que agradecer que se han dado grandes pasos en esto de la discapacidad... pero hay que normalizarla, hay que olvidar el tema de la diferencia... Los medios... dicen reflejar la realidad pero la desnaturalizan, por prejuicios, por ideología.... dejan al margen la realidad a la discapacidad convirtiéndola en casos aislados en víctimas o en un espectáculo...
  4. La discapacidad es más una cuestión de transversalidad que de realidad aislada y diferente. La discapacidad como la solidaridad no es de cuotas, no es de porcentajes, sino que es transversal. Entonces cuando hay una normalización no se actúa con políticas de cuotas. La realidad de las cuotas es un disparate. Por otro lado en la sociedad no existe la homogeneidad ni debe haberla...
  5. Hay una crítica a los medios de comunicación en el sentido de que aíslan la discapacidad en tanto se convierte en noticia, siendo del todo incapaces de construir transversalmente la discapacidad como un hecho más de lo humano, dentro de lo que supone entender el dolor y los límites de nuestra propia existencia como personas. En el fondo, la discapacidad no es algo coyuntural o accidental respecto a una supuesta vida normal, sino algo intrínseco a la vida humana.
  6. La opción de los discapacitados no es la opción por la diferencia sino es la opción por la integración y es una opción por la normalización. Eso exige estrategias distintas de las que se hacen en los medios e incluso en las asociaciones. Presencia de personas con discapacidad como personas capaces de desarrollar diversas actividades en la sociedad sin relación alguna con su discapacidad. Es una de las líneas de mayor interés para la investigación ya que con esta presencia se refuerza la imagen de su plena integración en la sociedad.
En segundo lugar hago mención de un artículo aparecido en ABC el 19 de mayo de 2015.
Actores, directores, guionistas, productores y representantes de distintas cadenas de televisión participaron el  21 de mayo de 2015 en la jornada "La Ficción en TV. Series y discapacidad, una trama por desarrollar", organizada por Fundación ONCE y el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi).
Esta primera jornada sobre el tratamiento de la discapacidad en las series de televisión forma parte de las actividades del 'Comité de apoyo a la imagen social de las personas con discapacidad en los medios de comunicación', una iniciativa pionera en Europa impulsada por Fundación ONCE y Cermi para dar mayor visibilidad a las personas con discapacidad en los medios. El Comité es un foro de debate de profesionales del sector, que surge como suma de voluntades, experiencias y esfuerzos para mejorar y potenciar la presencia de las personas con discapacidad en los medios.  Anualmente, el Comité organiza un encuentro, que este año se centra en la ficción en televisión, en concreto en el "boom" de la series y cómo están representadas las personas con discapacidad.
Fundación ONCE y Cermi buscan involucrar a los medios de comunicación y a los profesionales del sector en un mejor tratamiento de la imagen pública de las personas con discapacidad, como establece la Convención de Naciones Unidas para los Derechos de las Personas con Discapacidad.
Seguidamente resumo el artículo aparecido en Servimedia en septiembre 2017 bajo el título: “La discapacidad en ficción, una realidad aún imperceptible”
Las asociaciones de personas con discapacidad observan una evolución en la representación de personajes con distintas sensibilidades, pero inciden en la información para no perpetuar los estereotipos.
«Las series no pueden ser ajenas a esta realidad. Lo que queremos es que los guionistas descubran lo que podemos aportar»,  señala Antonio Mayor, director de comunicación e imagen de ONCE y su Fundación.  Si el mensaje es adecuado, informado y respetuoso no solo como individuo sino como colectivo, es un mensaje de doble dirección: fomenta el entendimiento, supone un apoyo para las familias y contribuye al desarrollo del propio discapacitado, muchas veces sobreprotegido por el entorno. Muchas otras veces, directamente ignorado.
No obstante, tampoco quieren aparecer a cualquier precio. Lo dicen las asociaciones y los espectadores con discapacidad, como Alba Prado, de la Confederación Estatal de Personas Sordas (CNSE), que incide en cómo se muestran las distintas sensibilidades en pantalla, normalmente o en burla o en lástima.
«La imagen siempre vale más que mil palabras a la hora de concienciar y sensibilizar. Tanto la televisión como el cine son dos altavoces extraordinarios para conseguir la normalización. La imagen cala y si desde la infancia ven en series y películas de cine a personas con discapacidad, se interiorizará como lo que es, algo completamente común y normal», explican desde la Confederación Aspace (Asociación de Parálisis Cerebral). «Se suele presentar como una carga, eso no ayuda a cambiar la visión que se tiene de la discapacidad. No queremos dar una imagen de pena, que digan “pobrecitos”», continúan desde Aspace.
Para terminar cito las palabras que pronunció una de las personas con discapacidad más famosa de los últimos años. «Los enanos somos reales», espetó Peter Dinklage en un programa de televisión en 2017. Que el ganador de un Globo de Oro y un Emmy por «Juego de Tronos» tuviera que «aclarar» esta situación muestra una parte de la realidad que viven las personas con discapacidad en el día a día. No obstante, también se observa que, sobre todo la ficción estadounidense, inicia tímidamente un cada vez más marcado proyecto por incluir la discapacidad en la pequeña pantalla, en la sociedad. Con series como «Breaking Bad», «Daredevil», o las más recientes «Touch», «Sin palabras», «Atípico», y roles no tan protagónicos.
Las personas con discapacidad sólo quieren ser visibles, eso sí, con información que deben aportar los propios interesados. Tienen mucho que aportar a la sociedad, en la pantalla y en la calle. Hay que estar alerta porque mientras se explotan cuestiones emocionales de amargura y superación, se ocultan los problemas sociales y la falta de derechos civiles que llevan a la marginación.