jueves, 24 de diciembre de 2015

¿Usamos el lenguaje de la ciencia?




Pareciera que la ciencia y el lenguaje son dos cosas distintas, sin embargo, la relación entre ambas es imprescindible, por lo que el aprendizaje del lenguaje como parte de la clase de ciencias es esencial desde que son pequeños.
Por eso el trabajo con el texto expositivo en general y con las exposiciones orales en particular es un mecanismo importante de acercamiento al conocimiento científico.
Por eso me gustaría desgranar un poco nuestras últimas exposiciones orales que podéis ver en nuestro blog de aula, su origen, su finalidad y su “futuro” y analizar también dos aspectos importantes:
  • La búsqueda, selección y tratamiento de la información.
  • El vocabulario científico.

Búsqueda, selección y tratamiento de la información.
Hasta ahora las exposiciones orales que habíamos realizado habían tenido un acompañamiento para la búsqueda de información.
Aunque hemos buscado diversidad de fuentes, incluidos los textos de “mayores” yo he servido de guía y de lectora para interpretar lo que estábamos leyendo.
Algunas son muy vivenciales, como las que cuentan los experimentos que han realizado en el rincón de la ciencia y en la que buscaron con mi ayuda la explicación científica del experimento.
Otras son sobre temas elegidos por ellos y la motivación está asegurada y también es mucho más fácil la comprensión.
Otras sobre los proyectos en los que estamos trabajando...
Cada una tiene objetivos diferentes y también grados de apoyo diversos por mi parte.
Pero están en tercero, ya saben “leer con soltura” y creo que deben ir adquiriendo mayor autonomía en esa búsqueda de información.
El primer paso ha sido comprobar que hacen cuando se enfrentan sin ayuda a esta tarea para, partiendo del resultado, analizar junto con el grupo las cosas que han hecho bien, en las que han tenido dificultades y sobre todo, las que tienen que mejorar.
La búsqueda de información la hicieron en pequeño grupo, en el Rincón de la biblioteca.
Primero seleccionaron todos los libros que tenemos en la biblioteca de aula sobre el cuerpo humano y que les iban a servir de consulta para preparar su exposición oral, elegir un tema y después tenían que seleccionar la información que les parecía interesante compartir con la clase, y organizarla.
Hubo de todo, unos grupos leyeron y buscaron información de forma más o menos seria y otros simplemente señalaron lo primero que se les ocurrió y tuvieron mucho de charla, incluso algún grupo, solamente señaló un esquema para todos.
Yo les fotocopié la información que habían elegido y retomaron en el grupo otro día como organizarla. En esta sesión, me fui pasando por los grupos y analizando con el grupo que tipo de información habían elegido, si se sentían capaces de explicarla a sus compañeros y si pensaban que era adecuada y aquí fuimos viendo los primeros aspectos de mejora.
En algunos casos suprimieron información porque habían abarcado mucho, en otros decidieron que les parecía adecuada e incluso el grupo que solo tenía una hoja con un “indice” se empecinó en que con eso tenía bastante y yo les dejé que continuaran.
Después de eso se lo llevaron a casa y lo prepararon. Al volver analizamos si les había costado trabajo o no prepararlo y teníamos diferentes situaciones:
Los que las mamás o papás les habían echado una mano y entendían “a su manera” el texto, quienes se lo habían aprendido de memoria y también, el grupo que solo llevaban un índice y que les habían ayudado en casa a buscar información de uno de los apartados y tuvieron que ver como organizaban lo que cada uno traía.
Les planteé algunas de las posibles preguntas que les podían hacer, sobre todo, para que fueran conscientes de que las partes que no entendían no iban a poder explicarlas si les preguntaban al final, así que en algunos casos volvimos a los textos y en otros yo intenté explicarles algunos conceptos.
Analizando con los grupos este proceso hemos señalado algunas cosas que debemos mejorar para la siguiente búsqueda de información:
  • Que no debemos “elegir sin leer”.
  • Necesitamos entender lo que seleccionamos.
  • Que podemos anotar las cosas que nos parecen importantes pero no entendemos bien para preguntarlas a los mayores.
  • Que en ciertos temas tener una imagen ayuda a explicar mejor lo que queremos contar.
A mi también me ha servido para saber sobre como debo ir avanzando, que cosas hacen bien y cuales necesito trabajar más:
He visto que tienen bastante autonomía y manejo en los textos: uso de índices, deducción del contenido solo con la lectura de los títulos, comprensión de dibujos y esquemas, pero que la lectura del texto les cansa pronto, por lo que tal vez es mejor hacerlo en varias sesiones de menos tiempo.
También que mi ayuda puede ir más encaminada a que vayan desarrollando estrategias para enfrentarse a esos párrafos que no acaban de entender: acudir al diccionario, a búsquedas en Internet (las búsquedas de imágenes son a veces muy valiosas), a inferencias por el contexto...


El vocabulario científico


Apropiarse del lenguaje científico es muy complicado, porque supone apropiarse de una terminología generalmente de uso bastante restringido y lo que es más difícil asociarla a significados que muchas veces implican procesos complejos de explicar y más aún de entender.
La pregunta que nos planteamos es ¿solo podemos trabajar el lenguaje científico cuando somos capaces de entenderlo o podemos intentar aprender contenidos científicos a través de un uso no totalmente comprensivo del mismo?
Cuando se les familiariza con el uso de textos expositivos, no solo no tienen miedo a la terminología específica, sino que les gusta usarla. Cuando “buceas” en la comprensión de lo que han usado, en algunas ocasiones te sorprendes porque entienden más de lo que uno espera, pero en la mayoría de los casos, hacen sus propias interpretaciones que además de ser muy muy divertidas, están basadas en el conocimiento previo que tienen sobre el tema de conocimiento que estemos abordando.
Para poder verlo, es importante trabajar con el público la importancia de las preguntas al acabar la exposición, porque a través de esas preguntas voy a poder comprobar en muchas ocasiones el grado de comprensión real, pero también la capacidad de inferir significados gracias al contexto o los conocimientos previos que tienen
Esta introducción me sirve de declaración de intenciones para intentar explicar el porqué no me preocupa demasiado que mis criaturas al preparar sus exposiciones orales usen un lenguaje que no entienden o que para ser más exactos “entienden a su manera”:

.- ¿Que son los haces primarios y secundarios?
.- A ver..., es las fibras musculares son..., a ver, las fibras musculares son los haces primarios, que si los haces primarios forman los haces secundarios, o sea, los haces secundarios son los haces primarios unidos y los haces primarios son... las fibras musculares

.- ¿Que es peristáltico?
.- ¿Movimientos peristálticos?
.- Siii
.- ¡Ahhh! Los movimientos peristálticos es cuando comes ¿no? Pues aquí (señala la zona del cuello) hay como unas tuberías que van así, la comida cae y van así (hace con el puño movimientos de apretar, a la vez que hace con el brazo un movimiento de varias curvas hacia abajo)

.- ¿Que es aracnoides?
.- Pues una meninge que son las que..
(Antonio la interrumpe)
.- Es como unas bacterias, es como si fueran unas bacterias
.- que protegen el cerebro
.- No el cerebro no, protegen muchas cosas, el cerebelo...

Aparte de que me encanta escuchar estas explicaciones y me parecen geniales y divertidas, creo que están desarrollando una gran capacidad de uso del lenguaje adecuándolo al contexto y una capacidad de inferir significados.

El significado total, llegará, estoy segura, pero también acompañado de muchas otras acciones. Por ejemplo en nuestro proyecto de robótica hemos comparado el funcionamiento del cuerpo humano con el funcionamiento de los robots y hemos visto semejanzas y diferencias en las funciones de alimentación, de relación...

La realización de experimentos, el visionado de vídeos o de modelos tridimensionales, la realización de entrevistas o encuestas, el aprender a hacerse preguntas..., todo eso va a contribuir también a que su conocimiento de la ciencia se vaya construyendo poco a poco.